Borrachera de Gastos; Subsidios y Estatizaciones:

Frente a la hola de estatizaciones (Futbol, papeleras, areolineas, Jubilaciones) y Subisdios (transporte, energia, salarios a empresas, etc..). Estamos inmersos en una borrachera, en una fiebre adictiva por derrochar dinero, como una persona descontrolada en un Shopping gastando con su tarjeta de crédito sin mirar ni pensar como lo va a pagar. O peor, ya sabe que lo va a pagar sacándo el dinero del pago de las cuentas de su casa, la comida, educación, salud y seguridad de sus hijos.
Esta posición en una persona común de a pie seria por supuesto irresponsable, desmesurada, suicida para su futuro.
Cuando esta posición la asume una Presidente, su controlante marido y una caterva de SINESTORSISTAS en este caso, es igual de irresponsable, desmesurado y suicida para el futuro de todo un país.
Una persona haciendo esto esta hipotecando su futuro, en nuestro país ya seria una segunda hipoteca pues ya pesa sobre el una deuda de U$S180000 casi el 70 del PBI y con los créditos cortados.
El principal problema que genera esta actitud por parte del máximo responsable de una familia o país, es que sus hijos o ciudadanos segun corresponda se acostumbran a vivir con un nivel de ingreso ficticio financiado por la tarjeta de crédito en un caso y por los impuestos, apropiación de cajas de ahorro para el futuro (AFJP) y como ya se demostró repetidas veces en los últimos 20 años terminan con la confiscación de los depósitos en los bancos. Unos hijos o una sociedad acostumbrada a vivir por encima de sus posibilidades “gratis”, o bajo la responsabilidad de "otros" además de perder las capacidades para generar sus propios recursos mediante el esfuerzo, y tener el aliciente para acrecentarlos para al final llegar al mismo nivel de vida pero real, genuino, sustentable, decía estas personas están condenadas a la frustración, al fracaso, como familia y/o Nacion.
Esta sociedad o hijos, por supuesto ante su imposibilidad de sustentarse cuando se acabe la fiesta, cuando llegue la cuenta, cuando le digan que el gas que consume mensualmente no cuesta mas $ 100 sino $ 600; que la leche de sus hijos no vale 3 pesos si no 7, va a entrar en una desesperación que no sabemos para donde saldrá disparada.
La incertidumbre del rumbo que tome la protesta es total, ya que paradojalmente la mayoría de la población falla en el diagnostico,y cree sinceramente que la salida es mas estatismo, intervencionismo, como si la borrachera se curase con mas alcohol, la gordura con mas comida. Solo las buenas costumbres se curan con mas de los mismo, la democracia con mas democracia, la libertad con mas libertad.
Vamos rumbo a la fractura, al corte de transversal de la sociedad, a la pelea de clases, exacerbada por un gobierno que le importa muy poco que quede tierra arrasada cuando ellos caigan.